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Editorial de PALESTINA HOY 21 de febrero de 2013 Por: Abdo Tounsi – TunSol
ZORRAS GUARDANDO GALLINAS
Las noticias: “La ex ministra Tzipi Livni liderará las negociaciones de paz con los palestinos / Tzipi Livni se sube al barco de Netanyahu"
“Según el acuerdo anunciado en una intervención conjunta anoche, será ministra de Justicia y liderará las negociaciones con los palestinos. Asimismo participará en el fórum más restringido del Gobierno. La reanudación del proceso de paz parece un escenario posible tras la formación del Gobierno israelí y la visita del presidente norteamericano Barack Obama a finales de marzo en Jerusalén y Ramala.”
¡El descaro sionista no tiene límite!… nombrar a una criminal de guerra para liderar un proceso de paz es lo mismo que poner a unas zorras a guardar gallinas, ya lo han hecho otras veces desde la mesa de Madrid 1991, presidiendo entonces la delegación sionista el terrorista Shamir y en todas las consecutivas mesas, siempre las delegaciones del Estado sionista incluían terroristas y criminales de guerra, pero esto no debe sorprendernos porque no encontrarán a nadie que no lo sea, en esa formación de hijos de Sion-Monstruo.
Tzipi Livni tiene un historial que los habitantes de la franja de Gaza en particular y los palestinos en general saben bien cómo se las trae. Es una odiosa política y su afán es acabar con toda clase de rebeldía palestina, sea del tipo que sea. Este personaje ideó políticamente la invasión de Gaza en 2008/2009; todos nos acordamos de sus declaraciones después del encuentro vergonzoso para cualquier árabe con el defenestrado Mubarak de Egipto en aquel tiempo, entonces jugó un rol para tintar a la resistencia palestina de terrorismo y anular la aspiración del pueblo palestino a una libertad incondicionada, que ahora quiere para ellos, en su nueva tarea “negociadora” con su visión particular como sionista, que sea de esclavos.
Si no fuera porque es una realidad muy cruda y cruel, podríamos calificar nombrar a esta criminal jefa de las mal llamadas negociaciones de paz, como una broma de mal gusto, pero ni es una broma ni es cuestión de gusto, sino es de una acción en la misma senda de las últimas dos décadas, donde marear la perdiz era y sigue siendo el objetivo de las delegaciones sionistas en las mesas, mesas que todas están patas arriba y también las que vayan a poner para sentar sobre ellas a esa nueva vieja cara de negociaciones, convirtiendo su fracasado intento en la política en un éxito, engañando al palestino y así poniéndose la medalla.
Que no se engañen los palestinos, ni Livni ni su jefe Netanyahu están por dar un solo párrafo por válido de los escritos que se hayan hecho o en materia de acuerdos o de proyectos y promesas, anteriormente firmadas o dichas. Nada se puede esperar de esa nueva comisión de negociaciones, ni de ese nuevo gabinete de víboras sionistas, que están bien alimentadas de tanto comer bienes palestinos durante su larga experiencia con un negociador palestino sumiso y débil.
Frente al “nuevo” gabinete sionista, debería haber un nuevo negociador palestino salido de los últimos triunfos del pueblo palestino, tanto en materia diplomática como en materia de resistencia. Así que nada de viejas fórmulas y nada de entrar al trapo por mucho que le adornen con la cara de una señora en la que sus colmillos brillan desde muy lejos.
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