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Editorial de PALESTINA HOY 3 de mayo de 2012 Por: Abdo Tounsi – TunSol
Subir al precipicio
La noticia: “Abbas, dispuesto a iniciar conversaciones de paz con Israel”
Todo el mundo y por las leyes físicas, podemos caer al precipicio, pero hay una excepción, los políticos no caen, al menos físicamente, porque desafían a estas leyes con las artes de la política que les proporciona fórmulas y en vez de precipitarse, ellos suben al precipicio como si de un ave se tratara y aparecen en la imagen dada la vuelta.
Decir a estas alturas que el Estado sionista tiene alguna intención, aunque fuera remota, de conversar con los palestinos para lograr acuerdos, es lo mismo que decir que el sionismo renunciará a sus objetivos en desalojar a los palestinos de toda Palestina. A lo largo de los 64 años este Estado usurpador, no ha hecho ni un amago de querer restablecer los derechos de los palestinos y todos los acuerdos que firmó con ellos han sido violados bajo mil y una escusas. Jamás cumplió con las resoluciones de las Naciones Unidas ni con los llamamientos de la comunidad internacional, por lo tanto creer ahora que cambiará su política es seguir subiendo al precipicio dando la vuelta a la imagen, desafiando las leyes físicas.
Señor Abbas, habla Ud. de “conversaciones de paz”… perdone que le corrija una cuestión semántica y muy importante a la hora de hablar de paz; para que haya conversaciones de paz tiene que haber un conflicto entre dos que se pelean, cosa que en el caso de la causa palestina no existe tal conflicto, lo que hay es una agresión por parte de una POTENCIA OCUPANTE que oprime y pone todas sus fuerzas: militares, policiacas, jurídicas, económicas… para usurpar los territorios del pueblo palestino, para terminar expulsándoles de su tierra. ¿Le parece que ésta realidad es un conflicto? Nada más lejos de la verdad que los palestinos estén en guerra con el Estado sionista.
La lucha por la independencia para restablecer los derechos legítimos del pueblo palestino, es una lucha que todas las leyes universales ampara, en consecuencia y en todo caso si tiene que haber algunas conversaciones con la POTENCIA OCUPANTE, no serán otras que no sean las de establecer un calendario de días para la entrega de territorios ocupados y de restablecer todos y cada uno de los derechos del pueblo palestino, que les han sido violados por el Estado sionista de Israhell.
Podrán los políticos poner la imagen de la realidad de la forma que les parezca, pero las leyes físicas son las que son y nadie podrá subir al precipicio sino caer en él. Seguir con la canción y su mala música de las “conversaciones de paz” compuesta por el Cuarteto, es perder el tiempo en un diálogo bizantino, dando tiempo al sionismo para completar su táctica de crear guetos en Cisjordania, para con ellos terminar asfixiando la población palestina forzándola a abandonar su tierra. Pero aquí no se queda la cuestión, porque dándole ese triunfo al sionismo pondrá en marcha las otras tácticas para su proyecto del gran Israel, y con ello la humanidad habrá perdido su sentido de ser y se convertirá en un mero espejismo que las futuras generaciones verán en un pasado de gloria y vivirán un presente de esclavitud.
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