El cajón de desastre del sastre sionista

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Editorial de PALESTINA HOY 7 de julio de 2012 Por: Abdo Tounsi – TunSol

El cajón de desastre del sastre sionista

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Dan por sentado que el traje a medida hecho por el sastre sionista para la zona de Oriente Medio, ha de ser el de a base de cortes del diseño original, tiene que valer para cada época y para cada guerra que el brazo armado del sionismo prepara. Del cajón de ese sastre salen los cortes para ese traje que supuestamente ha de estar perfecto y acorde con los diseños originales. Pero y como se dice, manga por hombros, el sastre anda sacando de ese cajón lo que le viene bien para un patrón que está ya más que trillado y viejo, creyendo que sigue siendo nuevo.

Las operaciones militares de la última década muestran que el sastre tiene un cajón de desastres y que sus trajes ya no son buenos. Mas parecen para un muñeco de hilos rotos que para su figura de hombre ideal: somos un país democrático, nos defendemos de los terroristas, somos los que hacemos progresar la zona en medio de unos bárbaros, hacemos del desierto un vergel… etc. Un cuento que hace crecer la nariz al sionismo que ya no ve si lo que cose es una hombrera o un ojal.     

A menudo salen los militares sionistas amenazando a los palestinos y a los países árabes, dando por hecho que ellos son la fuerza que domina el mapa estratégico de la zona y que los demás han de seguir su mandato y someterse a sus órdenes. Al parecer ya no saben hacer cuentas, les ciega el poder militar y el apoyo incondicional de los pajarracos que comen de la mano del sionismo y se olvidan de las últimas derrotas, primero en el Líbano luego en Gaza y por último contra la Flotilla de la Libertad (una derrota singular por sus dimensiones de pérdida de credibilidad). También andan amenazando a los persas por su programa nuclear, de esto ya llevan dos años y hasta hoy no encuentran el modo de atacar sin ser dañados, de forma que no se desmorone su capacidad de respuesta y haga añicos su leyenda de superioridad, por eso están empujando a que lo haga el eje del imperio del MAL, sin éxito hasta este momento.

El sastre no sabe que su traje ya no puede quedar nada bien para Egipto; por ejemplo o que el pueblo árabe ya hace sus propios trajes de libertad y dignidad o que los anti-sionismo del mundo, hacen boicot a todo lo que este sastre de trajes quiere vender por el mundo (BDS y muchas campañas de activistas pro Palestina, le están dejando sin escaparate para sus modelitos) Por eso cada vez se encierra más en su cajón buscando los cortes de un patrón ya deshecho, y cada vez que saca algo encuentra que el maniquí ya no es el mismo, su cajón de desastre es su perdición para una pasarela que solo existe en su imaginación.

Si el sionista piensa hacer un nuevo corte a medida de la nueva realidad, primero ha de tener las medidas, pero el mundo árabe ya no es el maniquí de siempre ni el mundo es el espectador de antaño en esa pasarela, queda el sionista solo en la pasarela imaginaria y con los focos que deslumbran a los desafortunados de espíritu.